28 Mar Padre nuestro.

Oración del miércoles 3 de abril.

Reunidos en torno a una vela, nos sentimos unidos como familia que somos, especialmente en este rato de oración.

Dejamos de lado preocupaciones, problemas, trabajo, estudio… y  ahora, en este ratito queremos estar contigo  porque eres nuestro Padre.

Hoy queremos rezarte, Padre nuestro,

haciendo presentes a todos los hombres que, como nosotros,

elevan los ojos al cielo llamándote Padre.

No queremos pedirte por ellos, sino por nosotros.

¡Son tantas las veces que, en tu nombre,

les llamamos hermanos y ni siquiera pensamos en ellos!.

¡Son tantas las veces que, en tu nombre,

buscamos el modo de cumplir con lo que Tú nos pides

y no nos molestamos en abrir los ojos para ver que es,

en los que has puesto a nuestro lado,

en nuestros hermanos,

el lugar en donde debemos decir y anunciar que Tú eres Nuestro Padre!.

Ayúdanos, Padre Nuestro,

a descubrirte en los que viven a nuestro lado para que así,

sabiendo que son tus hijos y nuestros hermanos,

nos comprometamos  en hacer que todos podamos vivir en el mundo que soñamos:

un lugar en el que todos vivamos como hermanos porque Tú nos has creado así.

Haz, Señor, que tu nombre sea santificado,

o mejor aún, que nosotros santifiquemos tu nombre tratando a nuestros hermanos como tales

y trabajando con empeño para que todos los hombres puedan vivir como verdaderos hijos tuyos:

con dignidad.

(Oración adaptada de Roberto Cortés de “Meditaciones breves en Cuaresma”)

Dios me amó hasta lo infinito; se encarnó, nació, vivió, padeció, murió  en la cruz y resucitó por mí. ¿Y no estará mi corazón lleno de amor y agradecimiento?  (EE, 1883) Propósitos